Nuevamente quedo demostrado el poder de los medios de comunicación en el mundo actual , sobretodo en aquellas sociedades medievales gobernadas con mano de hierro por decadentes regimenes (que son en realidad una menuda panda de traidores y colaboracionistas de EEUU e Israel, como lo ha demostrado recientemente Wikileaks ) que se especializan en reprimir sangrientamente todo vestigio de oposición política y religiosa para lo cual no dudan en silenciar en primer lugar aquellos medios que consideran “hostiles”, como es el caso por ejemplo de Aljazeera , una conocida cadena noticiosa del mundo árabe - con sede en Qatar- muy critica con aquellos gobiernos, quienes la han sometido a toda clase de represalias para acallarla , sin conseguirlo. Es así como los ciudadanos del mundo árabe pueden seguir con gran interés y entusiasmo los acontecimientos históricos de Túnez y se preguntan acerca del futuro de los otros regímenes represivos de la región. Una revolución que viene a destacar el papel crucial de las nuevas tecnologías en mover a los pueblos y que también pone en relevancia el papel repugnante de Occidente que brinda un apoyo incondicional para la continuidad de esas repudiables dictaduras. La revolución política que vive Túnez, demuestra que los mismos motivos que generaron el derrocamiento de este dictador existen en el resto de los países del mundo árabe sobre todo en los siguientes países hundidos en un mar de la corrupción como son Argelia, Marruecos, Libia, Egipto, Jordania, Siria, Arabía Saudi y Yemen. La revolución tunecina es muy reveladora de una nueva realidad política y social en el mundo árabe que demuestra el papel crucial de las nuevas tecnologías de comunicación como la Internet y el teléfono móvil que han permitido sacar imágenes de la actuación brutal de la policía y también el papel de las televisiones por satélite como la ya citada Aljazeera y también Alhiwar, además ediciones digitales de periódicos críticos como Alquds .Estas nuevas tecnologías facilitaron asimismo una coordinación perfecta entre los manifestantes de diferentes ciudades tunecinas e informaron a la opinión pública internacional de lo que realmente estaba sucediendo. Tras lo sucedido en Túnez, ya centenares de blogs y páginas web árabes piden desde la noche del viernes una solución a la tunecina en sus países. Parece que se viene una época de cambios y no podrán detenerlo. Esperemos que así sea :)
