TIEMPO RE@L

miércoles, 5 de julio de 2017

THE WALL STREET JOURNAL: Facebook emitirá sus propias series a finales de año

El vídeo es el futuro de Facebook tanto como su desesperada obtención de nuestros datos de usuario y está dispuesta a pagar lo que haga falta por tener los ‘mejores’ contenidos audiovisuales. Según ha revelado The Wall Street Journal hace unos días, Facebook - la conocida red social creada por la CIA, y que se encuentra a cargo del judío Mark Zuckerberg - está dispuesta a pagar altísimas sumas por contenido ‘original’ creado en Hollywood, hasta 3 millones de dólares por episodio (2,7 millones de euros). El gigante tecnológico está en negociaciones con múltiples agencias de Hollywood para conseguir, por un lado, producciones ‘originales’ de larga duración que se emitan íntegramente en su plataforma y, por el otro, productos más económicos y breves. Su objetivo: tener algo listo a finales del verano. La audiencia a la que quiere llegar Facebook con estos programas es la más jugosa para las agencias de publicidad, el segmento entre los 13 y los 34 años, y por eso quieren series como The Bachelor, Scandal o Pretty Little Liars. Cuando lancen su programación, se estima que haya dos docenas de programas propios. Lo publicado por The Wall Street Journal, aunque atrevido, no se distancia demasiado de lo que se ha venido comentando en múltiples círculos durante meses: que Facebook quiere ser el próximo YouTube a la vez que se distancia de su concepción como red social y deja atrás a competidores en ese área, como Twitter o Snapchat. El primer paso en esta dirección lo dieron el año pasado, cuando ofrecieron millones a varias compañías por emitir en directo en la plataforma. De entrar en el mundo del streaming y la producción de contenidos digitales, Facebook empezaría a competir con Netflix en muchos frentes, lo que sin duda ahora suena poco probable pero que, dada la ambición que parece haber detrás de esta inversión de la compañía, parece estar muy cerca. Las primeras compañías en producir programas propios para Facebook, según lo publicado por el WSJ, serían BuzzFeed, ATTN y Refinery 29, si bien estas estarían en el grupo de las producciones más asequibles y breves por la naturaleza de las compañías citadas. Aún así, se asegurarían ingresos de entre 5.000 y 20.000 dólares por episodio (4.465 y 17.862 euros, respectivamente). Como sabéis, Facebook no es la única compañía tecnológica que ha empezado a producir sus propios contenidos. Apple ya tiene dos programas, uno dedicado a aplicaciones llamado Planet of the Apps y otro de música y famosos, Carpool Karaoke, llevado por James Corden :(

ZTE BLADE V7 PLUS: Vive en ti

Corría el año 2016 cuando ZTE presentó con una nueva generación de terminales de su línea Blade. En el Mobile World Congress de aquel año realizado en Barcelona, vieron la luz tanto el Blade V7 como el Blade V7 Lite, y un año más tarde aterrizó la línea que los reemplazaría, los Blade V8. Pero parece que en ZTE han tenido un pequeño ataque de nostalgia y el V7 se actualiza, ligeramente, para estrenarse de nuevo este año. No debe extrañarnos movimiento semejantes, seguramente causados por las buenas ventas del modelo original y el intento de un reconocimiento de marca que han probado otros como Huawei con su P8 Lite 2017. El ZTE Blade V7 Plus es ya una realidad y llega manteniendo casi todo lo del modelo del pasado año, con un par de ligeros cambios. Veámoslos. Cuando comentamos que el ZTE Blade V7 Plus es muy parecido al original lo decimos de forma literal. En el nuevo terminal se mantiene, por ejemplo, la pantalla IPS LCD de 5,2 pulgadas y resolución FullHD del pasado año, incluso el diseño del frontal permanece inalterado con el botón Home en la parte central inferior. Para el procesador, repite el chip de cuatro núcleos del modelo de 2016. Volvemos a encontrarnos con el MediaTek MT6753 a 1,3GHz y acompañado de 2GB en la RAM y de 16GB en cuanto al almacenamiento interno. Para una renovación en el 2017, habríamos agradecido crecer hasta al menos 3GB de RAM y 32GB, pese a que contemos con la posibilidad de ampliar la memoria interna con una microSD. Para las cámaras tenemos 13 megapíxeles como sensor principal, ayudado por un flash LED de doble tono, HDR nativo y por la detección de fase en el enfoque. Si miramos hacia la cámara frontal, 5 megapíxeles para autoretratos. Aunque la parte trasera sí cambia, pues encontramos un lector de huellas bajo la lente de la cámara, un añadido interesante con respecto al modelo original. Llegamos a la batería y aquí apreciamos el segundo cambio en esta renovación. De los 2.500 mAh de batería del V7 pasamos a 2.540 mAh, algo es algo pese a que el incremento no es notable. Este Blade V7 Plus tendrá conectividad LTE, Bluetooth 4.0, WiFi, GPS y radio FM. Tendrá unas dimensiones de 146 x 72,5 x 7,5 milímetros y un peso de 136 gramos. El nuevo ZTE Blade V7 Plus aterriza con Marshmallow como sistema operativo, otra pequeña decepción en su renovación, y lo hace por ahoratanto en Rusia como en Australia. Sería lógico que acabase pisando cada territorio que tocó el Blade V7 original pero por ahora no hay noticias sobre una posible expansión internacional ni, por supuesto, de los precios locales en cada región. Llega en dorado y gris :)

domingo, 2 de julio de 2017

TERRA: Todo tiene su final

Incapaz de hacer frente a las redes sociales y otros medios online muy populares, Telefónica ha decidido poner el punto y final a la historia de Terra, que este viernes 30 de junio a las 23.59 cerró en todos los países en los que opera salvo Brasil. Fuentes de Telefónica han explicado que los portales de contenidos no eran un negocio sostenible, especialmente por el empuje de las redes sociales. Una muestra más de la deriva a la que ha estado la marca, pionera en internet, en los últimos años. Hace un par de años, sin embargo, se apostó por reforzar la parte editorial de los contenidos. Con ello vino un cambio de diseño y una apuesta en firme que acabó, con el tiempo, con la salida de varios redactores. Algunos de los que estuvieron en sus primeros años recuerdan con cariño su paso, pero también asumen una falta de visión de futuro en algunos aspectos. En el 2000, y cuando estaba a punto de ser cesado, Juan Villalonga, entonces presidente de Telefónica y máximo responsable del proyecto, quiso sacar pecho durante una conferencia en Barcelona en la que negó cualquier burbuja especulativa en Bolsa alrededor de internet. Le salieron unas palabras para el recuerdo: “Terra en tres años valdrá tanto como todo el grupo Telefónica gracias al espectacular crecimiento que están experimentando todas las áreas de negocio vinculadas a internet”. No estuvo más equivocado. En el 2005, Terra Networks, el máximo exponente hispano de este vacuo escaparate, dejó de cotizar en Bolsa, seis años después de que fuera lanzada al mercado. Los títulos de Terra se estrenaron en el parqué en 1999 con una espectacular subida del 213,3% en un sólo día. Aquella boyante llegada permitió a la operadora de internet colocarse entre las diez empresas españolas de mayor capitalización bursátil, lo que le valió su entrada en el selectivo Ibex 35 en enero de 2000. La trayectoria de Terra fue de todo menos tranquila. Han pasado mucho tiempo pero se recuerdan ciertos escándalos judiciales como el caso de Olé, el primer buscador de internet de habla hispana y comprado por valor de 2.000 millones de pesetas. También una de las mayores OPA de la historia de España como fue la adquisición de Lycos o importantes salidas de directivos. Una bomba que explotó. Pero, ¿qué pasó? ¿Por qué se llegó a esta situación? “Creo que Terra se convirtió en una plataforma de intereses personales, mucho más allá de un servicio de ADSL y contenidos como se concibió al principio”, reconoce un exempleado que prefiere no desvelar su nombre. No obstante, da una clave: “la gestión no fue buena y no hubo una curva de aprendizaje que permitiera a los empleados y accionistas a valorar en su justa medida lo que era un portal de Internet”. En su momento, la firma llegó a cotizar por encima de empresas de dilatada trayectoria como BBVA o Repsol, lo que provocó un quebradero financiero. Incluso se pensaba que sería una mina de oro. Tampoco fue del todo así. “El recuerdo de mucha gente es malo porque hubo quien compró por encima de los cien euros la acción para ver inmediatamente cómo bajaba por debajo de los diez”, añade. En el 2005, Telefónica formalizó su adquisición total pero, en realidad, fue el comienzo de su decadencia. “Terra siempre fue de Telefónica y se hicieron muchas cosas buenas de la mano de una gran compañía”. Este exempleado asegura que, pese a todo, se aprendió mucho de la burbuja tecnológica que agitó el mercado con el nuevo milenio y que pusieron la voz de alarma sobre los nuevos negocios de internet en aquella época. Hoy en día el fenómeno de los emprendedores y las “startups” está más que asumido. En ellas están depositadas las esperanzas de muchas personas que, en la mayoría de los casos, arriesgan parte de su dinero en alcanzar el sueño de crear un negocio con base tecnológica. Aunque también es cierto que gran parte de ellas pecan de hacer ciertos negociados y de generar más expectativas que realidad. “Los valores tradicionales en bolsa no podían competir con las tecnológicas, con una alta capacidad de gestación y desarrollo. Se crearon mercados paralelos... pero además aprendimos a convivir con lo digital. Las primeras adaptaciones a dispositivos, mercados verticales, productos ligados a banda ancha... todo eso nos valió para tener la tecnología que tenemos ahora”, subraya. En su opinión, “pasó del todo a la nada precisamente porque había mucha turbieza en algunos directivos que simplemente miraron por sus intereses personales”. Probablemente la razón por la que Terra fracasó, fue la de ejecutar un proyecto de internet como si se tratase de una corporación como Telefónica, de la que partía. Salida a bolsa por todo lo alto, ejecutivos de chaqueta y corbata, aviones privados, fiestas y equipos humanos desproporcionados, que a día de hoy, consideraríamos un despilfarro. En 1999, cuando se lanzó Terra, no existía un modelo de negocio real en internet, sólo la expectativa de que las millones de visitas de usuarios, se convirtieran en millones de euros en publicidad. Algo que nunca llegó ocurrir. Todos sabemos que las empresas de internet tienen que tener una estructura ligera, muchas veces requiere de flexibilidad para poder innovar. En cualquier caso es necesario tener una cosa en claro: adaptarse a los continuos cambios que sufre el sector, que lejos de ser estable, todavía es un sector por definirse, tanto en contenidos como en modelos de negocio. Ahora vivimos una época de “influencers”, pero hace nada fueron las redes sociales y antes los portales verticales. Aunque Terra mantendrá los servicios móviles que presta en colaboración con operadoras, sí cerrará tanto el portal de contenidos como el servicio de Terra Mail gratuito. "Le recomendamos que realice el backup de sus mensajes y archivos y avise a sus contactos, ya que desde el 1 de julio de 2017 no será posible acceder a su(s) cuenta(s), ni tampoco a los mensaje(s) guardados. A partir de esa fecha, todos los mensajes no estarán disponibles", informó la compañía en un comunicado. El portal cerró sus dominios en Argentina, Chile, Colombia, EE.UU., España, Méjico y Perú. "Agradecemos su confianza en nuestros servicios durante este tiempo en que estuvimos juntos", firma el equipo de Terra a modo de despedida :(

SAMSUNG GALAXY NOTE 7 FAN EDITION: El regreso del hijo pródigo

Se han escrito guiones para series de televisión con menos páginas que las que hubiese proporcionado la historia del Samsung Galaxy Note 7 desde su llegada hasta su salida del mercado. Pese a las complicaciones en la gestión de la crisis causada por las baterías defectuosas del dispositivo, el incidente ayudó a que se formase una conciencia global sobre la peligrosidad de las baterías, y a que se mejorase la seguridad en las mismas. Durante un tiempo se pensó no ya que el Note 7 desaparecería para siempre sino que el propio Note 8 peligraba en la futura hoja de ruta de su fabricante. Sin embargo, pronto comenzaron a surgir informaciones más o menos fiables sobre un Galaxy Note 7 FE que venía camino del mercado y ahora ya tiene nombre oficial: Samsung Galaxy Note 7 Fan Edition. Tras la mala fama que cosechó el Note 7 a causa de los problemas de sus baterías, extendida también en parte al resto de la marca, hacer un llamamiento a los fans de la marca de forma tan directa parece un movimiento para devolver el terminal al mercado. El Samsung Galaxy Note 7 Fan Edition será casi idéntico al Note 7 original aunque su reacondicionamiento tendrá un coste esencial: perder batería por el camino. Samsung ha querido pecar de prudente ante la posibilidad de que surjan nuevos incidentes y ahora la batería es menor, con el añadido de que conversaciones con Greenpeace habrían hecho que Samsung reconsiderase el tamaño de las pilas internas del Note 7, de 3.500 mAh a 3.200 mAh. Ahora el teléfono será más seguro y causará un menor impacto medioambiental cuando toque reciclarlo. Así es como ya sabemos qué significan las siglas FE asociadas a la vuelta del Note 7 a las tiendas. El regreso del hijo pródigo está previsto para el próximo 7 de julio y por el momento se desconoce en qué países llegará a ponerse a la venta, aunque sí se rumorea que el precio podría ser cercano a los 700 dólares/euros. Como decimos, su llegada está dedicada a los seguidores más fieles de la marca coreana. Veremos qué tal le van las ventas a este nuevo Note 7 Fan Edition con el Galaxy Note 8 a poco más de dos meses de su estreno oficial. Probablemente el relanzamiento del dispositivo haya sido motivado en parte por el orgullo del propio fabricante, decidido a demostrar el buen rendimiento de su smartphone. Y también es posible que no se relancen más de las 2,5 millones de unidades que Samsung aún guardaba en sus almacenes tras el cese del terminal :)
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