The Wall Street Journal se suma a esa avalancha de noticias sobre programas de monitorización y espionaje, pero esta vez para hablar del FBI y algunas de las técnicas que la siniestra agencia de inteligencia estadounidense utiliza en su seguimiento a “sospechosos”. Según este diario,el FBI lleva tiempo haciendo uso de todo tipo de herramientas típicas de hackers e incluso cibercriminales para hacer el seguimiento de las comunicaciones móviles y digitales de los “sospechosos” a los que investiga. EL FBI desarrolla algunas herramientas de hacking internamente y compra otras en el sector privado. Pero con esa tecnología, el FBI puede por ejemplo activar remotamente los micrófonos de teléfonos basados en Android para grabar conversaciones, indicaba un alto cargo del gobierno de los EE.UU. Estas herramientas se utilizan en casos relacionados con el crimen organizado, la pornografía infantil o el antiterrorismo, y su uso está de nuevo impulsando el debate sobre este tipo de actuaciones. Christopher Soghoian, de la American Civil Liberties Union, indicaba que “la gente debería comprender que la policía local va a utilizar el hacking en objetivos a los que vigila“. La intervención del Departamento de Justicia debería ser necesaria en cada caso en el que el FBIquiere aplicar dichas técnicas, pero parece que nuevamente existen muchas imprecisiones sobre los casos en los que realmente se necesita ese permiso judicial. Según el WSJ, los responsables del FBI instalan herramientas de vigilancia logrando que la persona a vigilar descargue un documento o haga clic en un enlace, de igual forma a la que muchos cibercriminales logran instalar sus aplicaciones malware. Según un ex-empleado de estos organismos, el FBI tiene controles para asegurar que solo se monitorizan los “datos relevantes”, aunque de nuevo estas herramientas —que efectivamente pueden servir para luchar contra todo tipo de delitos— vuelven a abrir el debate sobre la validez de su aplicación :(