La industria del entretenimiento suele decir sin razón alguna que la descarga de material pirata tiene efectos “negativos” sobre los derechos de los autores titulares de las obras,lo cual perjudica sus ingresos y genera una pérdida de “importantes cantidades de dinero” (por mi que lo sigan perdiendo, menuda panda de ladrones) En medio del debate de la libertad versus la restricción, varios gobiernos han impulsado leyes e iniciativas para acabar con la piratería. El mes pasado, por ejemplo, la Industria Fonográfica británica ganó una batalla judicial para obligar a los proveedores de servicios de internet del Reino Unido a bloquear el acceso a sus clientes del sitio The Pirate Bay, especializado en la descarga de torrents y frecuentemente citado como un paladín de la libertad de descargas en internet. Aunque las productoras de cine o las compañías disqueras suelen citar enormes sumas de dinero que se pierden -según ellos - por culpa de la piratería, la verdadera magnitud de su impacto financiero es fuertemente cuestionada por los activistas de los derechos de internet. En medio de ese debate llega Pirate Pay, una herramienta creada para defender sus sucios intereses. En efecto, Microsoft ha financiado con 100.000 dólares el proyecto de tres emprendedores rusos que han creado ese sistema con el objetivo de torpedear las descargas de películas mientras se estrenan en los cines. En efecto, los servidores de Pirate Pay se encargan de generar un tráfico malicioso que confunde a las aplicaciones P2P provocando su desconexión. Los tres creadores de Pirate Pay empezaron en el 2009 programando un sistema de gestión de tráfico para un proveedor de internet ruso. Tras comprobar el potencial de la herramienta que habían creado, decidieron lanzarla como solución comercial, ofreciéndola a otras empresas interesadas en poner coto a la descarga de sus archivos en las redes de intercambio. Así. la división rusa de Walt Disney y Sony Pictures figuran como socios en la página web del proyecto. De esta manera cuando sus estrenos se proyectan en las salas de cine del país, Pirate Pay se encarga de rastrear las redes torrent y complicar la descarga de la película, trabajo por el que pueden cobrar entre 12.000 y 50.000 $.La tecnología de Pirate Pay trabaja interfiriendo en la comunicación que realizan dos clientes P2P antes de iniciar la transferencia. Una vez que el proyecto se haga realidad, esperan expandirse a nivel internacional. Por otra parte sus críticos dicen que el método de software será ineficiente en el largo plazo. Y esperemos que tengan razón. No a la guerra sucia :(
TIEMPO RE@L
miércoles, 16 de mayo de 2012
PIRATE PAY: Estalla la Guerra Sucia contra la P2P financiada por Microsoft
La industria del entretenimiento suele decir sin razón alguna que la descarga de material pirata tiene efectos “negativos” sobre los derechos de los autores titulares de las obras,lo cual perjudica sus ingresos y genera una pérdida de “importantes cantidades de dinero” (por mi que lo sigan perdiendo, menuda panda de ladrones) En medio del debate de la libertad versus la restricción, varios gobiernos han impulsado leyes e iniciativas para acabar con la piratería. El mes pasado, por ejemplo, la Industria Fonográfica británica ganó una batalla judicial para obligar a los proveedores de servicios de internet del Reino Unido a bloquear el acceso a sus clientes del sitio The Pirate Bay, especializado en la descarga de torrents y frecuentemente citado como un paladín de la libertad de descargas en internet. Aunque las productoras de cine o las compañías disqueras suelen citar enormes sumas de dinero que se pierden -según ellos - por culpa de la piratería, la verdadera magnitud de su impacto financiero es fuertemente cuestionada por los activistas de los derechos de internet. En medio de ese debate llega Pirate Pay, una herramienta creada para defender sus sucios intereses. En efecto, Microsoft ha financiado con 100.000 dólares el proyecto de tres emprendedores rusos que han creado ese sistema con el objetivo de torpedear las descargas de películas mientras se estrenan en los cines. En efecto, los servidores de Pirate Pay se encargan de generar un tráfico malicioso que confunde a las aplicaciones P2P provocando su desconexión. Los tres creadores de Pirate Pay empezaron en el 2009 programando un sistema de gestión de tráfico para un proveedor de internet ruso. Tras comprobar el potencial de la herramienta que habían creado, decidieron lanzarla como solución comercial, ofreciéndola a otras empresas interesadas en poner coto a la descarga de sus archivos en las redes de intercambio. Así. la división rusa de Walt Disney y Sony Pictures figuran como socios en la página web del proyecto. De esta manera cuando sus estrenos se proyectan en las salas de cine del país, Pirate Pay se encarga de rastrear las redes torrent y complicar la descarga de la película, trabajo por el que pueden cobrar entre 12.000 y 50.000 $.La tecnología de Pirate Pay trabaja interfiriendo en la comunicación que realizan dos clientes P2P antes de iniciar la transferencia. Una vez que el proyecto se haga realidad, esperan expandirse a nivel internacional. Por otra parte sus críticos dicen que el método de software será ineficiente en el largo plazo. Y esperemos que tengan razón. No a la guerra sucia :(